Bar Cock: Un icono de la coctelería madrileña según El País

El artículo de El País dedica un espacio destacado al Bar Cock, subrayando su papel pionero y su relevancia histórica en la vida nocturna de Madrid.

Un siglo de historia y modernidad

El Cock abrió sus puertas hace más de 100 años, fundado por Emilio Saracho como una réplica de los clubes nocturnos londinenses. Su decoración -vidrieras coloridas, chimenea de mármol, boiseries y detalles de ebanistería y latón- evocaba elegancia y sofisticación, marcando la diferencia con las tabernas y botillerías tradicionales de la época. El artículo lo define como “el primer bar moderno de la ciudad”, símbolo de la apertura y modernización de Madrid en los años veinte, cuando la capital comenzaba a impregnarse del hedonismo europeo de entreguerras.

Un nombre con historia y anécdotas

Saracho bautizó el local como “Cock”, inspirado en la palabra cocktail, aunque la polisemia en inglés ha provocado más de una anécdota divertida con visitantes internacionales, como el propio George Clooney, quien pensó que lo llevaban a un local gay por el doble sentido de la palabra.

Cuna de la coctelería madrileña

Desde sus inicios, el Cock apostó por la calidad de sus cócteles. Chicote, quien luego fundaría su propio bar, fue el primer barman del Cock. En los años cuarenta, Chicote llegó a comprar el Cock para ampliarlo, creando un reservado trasero que se convirtió en refugio de la élite y la discreción en los años del franquismo.

Renacimiento en los años 80 y epicentro cultural

En los años ochenta, el Cock vivió una restauración meticulosa liderada por Patricia Ferrer (Pachi) y un grupo de socios. Recuperaron la elegancia original del local y lo transformaron en un punto de encuentro para la Movida madrileña, la aristocracia, la burguesía y, sobre todo, el mundo del arte. El Cock se convirtió en el “backstage” oficioso de la feria ARCO, donde artistas y galeristas cerraban acuerdos y tejían complicidades.

Un bar de leyenda y clientela diversa

El Cock ha sido frecuentado por figuras como Francis Bacon, que dejó su huella con un posavasos firmado, y artistas como Ceesepe, Juan Hidalgo y Sigfrido Martín Begué, cuyas obras decoran la galería del bar. El ambiente del Cock sigue siendo un imán para todo tipo de público, de todas las edades y profesiones, manteniendo su aura de exclusividad y elegancia. La entrada, vigilada por un portero, refuerza la sensación de pertenencia a un club selecto, donde “siempre pasa algo interesante”.

Cócteles clásicos y personalidad propia

El artículo de El País resalta la maestría de los barmanes del Cock, que han perfeccionado clásicos como el dry martini, el cosmopolitan y el gin fizz, manteniendo viva la tradición de la coctelería de calidad en Madrid. El Cock es uno de los pocos bares donde aún se puede disfrutar de recetas clásicas elaboradas con precisión y personalidad, consolidándose como referencia ineludible para quienes buscan la auténtica experiencia de la noche madrileña.

El País describe al Cock como un lugar donde la historia, la modernidad y la cultura se entrelazan. Es un bar que ha sabido reinventarse sin perder su esencia, acogiendo a generaciones de madrileños y visitantes ilustres. Visitar el Cock es sumergirse en la historia viva de Madrid, disfrutar de cócteles legendarios y formar parte de una comunidad selecta que valora la autenticidad, la elegancia y el arte de la buena vida.